En el marco de nuestras iniciativas para el año 2025, estamos muy ilusionados de anunciar un nuevo proyecto, que busca hacer una diferencia significativa en la vida de muchas familias.
Se trata de crear un fondo de ayudas, para aquellas familias con personas a su cargo, que sufran problemas de salud mental y/o personas con discapacidad. Habitualmente estas personas permanecen aisladas y marginadas sin apenas recursos básicos.
La situación de la salud mental y las personas con discapacidad en Timor Leste es precaria, con recursos y servicios muy limitados. A pesar de algunos avances, persisten importantes desafíos que dificultan el acceso a una atención adecuada.
Salud Mental
Escasez de recursos: Timor Leste cuenta con muy pocos profesionales de salud mental, y una infraestructura prácticamente inexistente para atender a personas con algún tipo de trastorno.
Tratamientos tradicionales: En muchas ocasiones, las personas con enfermedades mentales son tratadas con medicina tradicional, rituales culturales y religiosos antiguos, debido a la falta de acceso a tratamientos médicos convencionales.
Estigma social: El estigma asociado a las enfermedades mentales es un obstáculo importante para la búsqueda de ayuda y el acceso a los servicios.
Limitada cobertura: Se estima que un alto porcentaje de personas con trastornos mentales y neurológicos, especialmente en zonas rurales y remotas, no reciben ningún tipo de tratamiento.
Discapacidad
Falta de datos: No se dispone de datos precisos sobre la prevalencia de la discapacidad en Timor Leste, lo que dificulta la planificación e implementación de políticas públicas adecuadas.
Pobreza y exclusión: Las personas con discapacidad a menudo enfrentan mayores niveles de pobreza y exclusión social, con dificultades para acceder a la educación, el empleo y otros servicios básicos.
Barreras físicas y sociales: Las barreras físicas en el entorno y las actitudes discriminatorias, dificultan la participación plena de las personas con capacidades diferentes en la sociedad.
Desafíos persistentes
Formación de profesionales: Se necesita una mayor inversión en la formación de profesionales de salud mental y rehabilitación.
Desarrollo de servicios: Es fundamental ampliar la oferta de servicios de salud mental y apoyo a la discapacidad, con un enfoque comunitario y descentralizado.
Sensibilización y concientización: Se deben realizar campañas de sensibilización para reducir el estigma asociado a la enfermedad mental y la discapacidad, así como promover la inclusión social.
En resumen, la situación de la salud mental y las personas con discapacidad en Timor Leste es aún precaria, pero se están realizando esfuerzos para mejorarla. Es necesario seguir trabajando para garantizar el acceso a servicios de calidad, y promover la inclusión social de estas personas.
Begoña Díaz de Diego. (Directora de proyectos)
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